San Ildefonso en el Tiempo | Creación del Colegio de San Pedro y San Pablo

Creación del Colegio de San Pedro y San Pablo

En su tiempo se hizo la concordia con la Universidad de México,

se renunció a la administración del seminario de San Pedro y San Pablo

por las molestias que causaron los patronos y se reunieron en uno solo,

el de San Ildefonso…

Gerard Decorme

Iglesia de San Pedro y San Pablo, en la calle San Ildefonso en la Ciudad de México,
Casasola fotógrafo. ©Mediateca INAH

Puerta del antiguo templo de San Pedro y San Pablo,
Casasola fotógrafo ©Mediateca INAH

Hacia 1575, Pedro Sánchez comenzó a proyectar la edificación del Colegio Máximo de San Pedro y San Pablo, denominado así porque se pensó como un recinto para los padres de la compañía que llegaron con el provincial, los cuales ya habían profesado los cuatro votos propios de la orden y también contaban con grados universitarios, distinciones que comprobaban su asistencia a la universidad como aval para impartir seminarios en los colegios menores.

La consagración del Colegio Máximo a los protomártires de la cristiandad San Pedro y San Pablo adquiere significados profundos para la labor misionera que los jesuitas: el primero es piedra fundacional de la cristiandad, mientras que el segundo es la imagen del gentil converso que asume su creencia y la difunde a cualquier costo. Estos dos preceptos son en conjunto los ideales misioneros con los Ignacio de Loyola y los jesuitas tendrán como ejemplo a seguir.

Si bien, la imagen de liderazgo que representó Pedro Sánchez estuvo encaminada a asentar el proyecto jesuita en la Nueva España, también contribuyó a establecer la imagen que en colectividad la compañía deseaba trasmitir al exterior.

Pasado los tres meses de inestabilidad al llegar al Ciudad de México, se dio paso a la constitución de la sede de los jesuitas: el Colegio de San Pedro y San Pablo fue la casa matriz y centro formador del jesuitismo novohispano.

Fueron entonces los solares que Alonso de Villaseca a un costado de la catedral la base para iniciar el proceso de asentamiento y las limosnas que sumaron un total $156,690 pesos duros de plata empleadas en acrecentar las propiedades y fortalecer las finanzas de los alonsiacos que nos permiten entender cómo se fundaron los asentamientos que dieron origen al Colegio de San Ildefonso.

Jonatan Chávez

Historiador y Coordinador de Voluntariado y Servicios al Público del Colegio de San Ildefonso.

Bibliografía:

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Gonzalbo Aizpuru, Pilar. La educación popular de los jesuitas. México, UIA, 1989.
________________. Educación, familia y vida cotidiana en el México virreinal. México, Colmex, 2013.
Vargaslugo Elisa. (1997). “El Real y Más Antiguo Colegio de San Ildefonso”, en Antiguo Colegio de San Ildefonso, México, Nafin, 1997.